Arruabarrena ganó la apuesta que tenía con al juez: fue parado por no expulsar a Pérez. Ahora, la comida.
Ninguno se hace cargo. No quieren abrir la billetera para pagar la adeudado. Ambos piensan que tienen razón en la jugada en la que Damián Pérez le comete falta a Martín Galmarini. Pero sólo uno será el ganador.
Olé , el mismo día del partido, ya había fallado a favor de Rodolfo Arruabarrena basándose en el reglamento, ya que el defensor de Arsenal se desentiendIó de la jugada para golpear al de Tigre. Pero Néstor Pitana que aceptó el reto del Vasco ("Te apuesto una cena", le dijo en el entretiempo), luego de volver a ver por televisión mantuvo se postura considerando que fue una falta leve.
Pero ahora, el árbitro tendrá que descansar por una fecha ya que fue parado por este fin de semana (ayer arbitró Nacional de Montevideo ante Alianza Lima por Copa Libertadores porque ya estaba programado) por la Comisión Arbitral. ¿Los argumentos? No haber expulsado a Pérez en esa jugada y no sacarle la roja a Carlos Casteglione, en el final del partido. ¿Entonces? A pesar de las distintas opiniones y chicanas entre el entrenador y el juez (con muy buena onda por cierto) el misionero tendrá que aflojar y pagar lo que debe. Y el Vasco, para pasar el mal trago del domingo, ya había anticipado que no iba a andar con chiquitas. "Estaba seguro de que había ganado, voy a elegir algo bien caro y espero que me pague", aseguró.
Ahora apareció lo que faltaba: un mediador que intervenga para dar un fallo que no pueda ser discutido. El Vasco apostó y ganó, el juez aceptó y perdió. Pagá, Pitana...
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